Cada vez más conocidos y ambiciosos, estos Encuentros que se celebran cada mes de julio en la maravillosa ciudad de Montepulciano (Toscana), lugar de famosos vinos y espléndidos paisajes, concitan un diálogo tripartito entre sindicatos, patronales y autoridades, en donde estas últimas se encuentran representadas especialmente por altos miembros de la OIT y de la Unión Europea.
Los temas están cuidadosamente escogidos, como todos los años: menores inmigrantes; el (deseable) contrato social para Europa y el mundo; reformas laborales y «flexinseguridad» (sic); el futuro del trabajo entre sostenibilidad e innovación; ejemplos de integración y movilización democrática en torno a la normativa laboral, etc. A veces el tema de las mesas redondas ha sido directamente interrogativo: ¿Qué servicios y medidas de políticas activas de empleo para las empresas?, por ejemplo. Otras son directamente dirigidas al futuro: Welfare y sostenibilidad: construir un pilar de derechos sociales en el caso de Italia; o El trabajo del mañana entre robotización e inteligencia artificial; o, en fin, Instrumentos para la gestión de las transformación digital -desarrollo y sostenibilidad ocupacional-. Otros hablan de las efemérides de momento, como la mesa redonda sobre Los 100 años de la OIT.
Varios de los encuentros han ido referidos específicamente a un problema que interesa mucho en Italia, pero no menos en España: el fenómeno de la inmigración masiva, tanto desde la legislación como desde la otra parte, los inmigrantes.
La intensidad de las intervenciones y de los temas ha ido in crescendo en cada uno de los tres días que ha durado el encuentro, con un climax el sábado, en el que los líderes de grandes sindicatos y grupos empresariales han debatido el tema del Desarrollo sostenible y «just transition»: Angelo Colombini, secretario general de la CISL; Sharan Burrow, secretario general de la Confederación de Sindicatos Internacionales; Liina Carr, Secretario confederal de la Confederación Europea de Sindicatos, así como altos cargos de ENEL y TAP.
No han sido los únicos altos cargos presentes en las mesas redondas, pues también cabe mencionar a Giuseppe Casale, director del centro de formación de la OIT en Turín, a Luca Visentini, secretario general de la CES y a Esther Lynch, Secretaria General Adjunta CES; a Pierangelo Albini, director de asuntos laborales y welfare de CONFINDUSTRIA, a Ricardo Giovani, director laboral de CONFARTIGIANATO, y, en fin, a altos cargos de grandes empresas y del Ministerio del Trabajo, de la Región Toscana y del Parlamento Europeo.
Entre los especialistas académicos cabe mencionar a los profesores C. Alessi (Brescia), A. Maresca (Roma), M. Marazza (Roma), M. Borzaga (Trento), F. Dorssemont (Lovaina), M. Ramos Quintana (La Laguna), G. Rojas Rivero (La Laguna), y A. Ojeda Avilés (Sevilla).
El encuentro de Luces del Lavoro es además un contenedor de otras actividades importantes a las que auspicia y acoge. Destaca la del premio internacional «Massimo d’Antona», que ha correspondido este año a la graduada de La Laguna Laura Ionita, pero también los encuentros académicos de la Labour Academy y la asociación Freccia Rossa, coordinados por la Universidad digital Universitas Mercatorum, que han reclamado a numerosos profesores de toda Italia (Camusso, Bavaro, Gottardi, Del Punta, Magnani, Tullini, Visentini, Romei, Barbieri, De Luca Tamajo, Maresca, y otros), o la Escuela Europea de Relaciones Industriales, dirigida por el profesor Gianni Arrigo, asimismo coordinador del Encuentro Luci sul Lavoro en su globalidad.
La intensidad del Encuentro llega al paroxismo, si podemos hablar así, con una diversidad de monólogos, conversaciones y debates celebradas en el patio o claustro de la fortaleza de Montepulciano, así como exposiciones sobre (este año) Leonardo da Vinci y el agua, o conciertos en «Cantiera».
El esfuerzo principal del Encuentro lo desarrolla, como todos los años, el presidente de EIDOS (Instituto de Documentación y Estudios Sociales), Gianni Arrigo, con la inestimable colaboración del presidente de Fondazione Lavoro, Enrico Limardo, y del presidente de IRIS, Carmine Russo, este año ausente por motivos académicos. Junto al prof. Arrigo, el ayuntamiento de Montepulciano presta un apoyo entusiasta en la persona de su alcalde y en el lugar del Encuentro, la mágica Fortaleza Medicea de Montepulciano.
